El social media se ha convertido en el canal de atención al consumidor por excelencia. Y es que, la atención de las marcas a sus clientes a través de las redes sociales es clave para el rumbo de los negocios.
El poder de amplificación de los mensajes en Twitter o Facebook obliga a las marcas a estar siempre alerta pues en una milésima de segundo su situación puede cambiar de manera radical.