Mucho he comentado ya sobre Twitter, sobre sus usos, sobre sus posibilidades… incluso tenéis disponible un libro (PDF gratuito) que publiqué en 2009 sobre el tema, dando una visión general de la Red, tanto para quien está empezando como quien quiere conocer algunas aplicaciones originales de esta red de contenido.
El caso es que después de mucho tiempo gestionando varias cuentas de Twitter, tanto profesionales como personales, quiero compartir con vosotros algunas lecciones que he aprendido con el tiempo. Espero que alguna de ellas os sirva de algo.
– Si mantenéis la cuenta de Twitter de una publicación online, intentad que los textos se publiquen con un intervalo de más de 45 minutos. En caso contrario la linea de tiempo de vuestros seguidores puede llenarse con vuestras noticias, dando la sensación de un monopolio de espacio que a nadie le gusta.
– Una cuenta de Twitter de una publicación, que mezcla noticias con mensajes personales a los seguidores, puede generar un volumen de información excesivo, estresando a los que leen las noticias y que no están muy interesados en las respuestas personales que se dan. Una solución podría ser la decrear dos cuentas distintas: una para informar y otra para responder mensajes y enviar textos de otro orden de relevancia. Es algo parecido a lo que hago yo con @wwwhatsnew (sólo noticias) y@juandiegopolo (respondo y comento asuntos personales).
– Usad el buscador de Twitter para encontrar posibles clientes. En search.twitter.com tenemos la posibilidad de filtrar mensajes de personas. Si alguien publica un texto “necesito alojamiento en Barcelona” y gestionamos la cuenta de un hotel en dicha zona, sería un error perder la oportunidad de ofrecer un servicio solicitado. No confundirlo con las ofertas de productos no solicitados, eso sería spam…
– Visitad el perfil de los usuarios antes de responder una cuestión. Si recibimos una pregunta de una persona, tenemos que responder, en 140 caracteres, de la mejor forma posible. Conociendo el perfil de quien pregunta podremos configurar la respuesta de forma más efectiva y personal.
– Tened siempre listo un formulario en la web donde los usuarios puedan realizar preguntas con más detalle. Muchas veces es necesario indicar la url de un formulario más completo para que los clientes puedan explicar mejor su problema o necesidad (algo muy difícil en el espacio disponible en Twitter).
– No transforméis Twitter en un chat. Es muy fácil engancharse en una conversación con un cliente, pero Twitter no es el lugar para hacer eso. Un flujo de mensajes direccionados a una misma persona puede tener un efecto negativo en los otros seguidores, que no están interesados en dicha conversación. De la misma forma que podéis tener un formulario web siempre listo, es fácil configurar una sala de chat para tratar asuntos más personales. Aquí os dejo algunas opciones preparadas para ello.
En fin, ya sé que la mayoría responden al sentido común, pero nunca viene mal recordar que lo que se escribe en Twitter lo pueden leer TODOS los seguidores.
Vía: wwwhatsnew